En el debate de la
mesa
redonda sobre Bibliotecas y web social, un profesor de matemáticas de la
Universidad de Sevilla se sorprendió de las aplicaciones y herramientas de la
web 2.0 que la Biblioteca de la US ofrecía a sus usuarios. Desde el año 2006, la
BUS ha venido trabajando en la implementación de nuevos productos y servicios
que, usando las tecnologías de la web 2.0, hicieran del usuario el centro de
nuestro Servicio y colocaran a la biblioteca donde el usuario está.Gracias
al
trabajo colaborativo de
un grupo de bibliotecarios, se pusieron en marcha los
blogs
de la biblioteca, las
wikis
termáticas y de
apoyo a
asignaturas, un
sistema de chat
con pretensiones colaborativas, nuevas utilidades del Opac Social
(relevancia, URL permanente, RSS, plugin de búsqueda en el catálogo y widgets
del catálogo para descargar en el escritorio de iGoogle, etc.). Al mismo tiempo
se abrieron cuentas en
YouTube,
Flickr, Slideshare,
Facebook.
Como apoyo a toda esta actividad, se realizaron cursos de formación al personal
de la biblioteca , que en todo momento contó con la ayuda personalizada de la
Sección de Apoyo a la docencia y la Investigación de la Biblioteca. Para dar un
marco de actuaciones y recomendaciones se elaboró un documento marco que en
estos momentos está siendo valorado por la dirección de la
biblioteca.Nuestra experiencia ha servido para que otras bibliotecas
universitarias nos pidieran cursos de formación en biblioteca 2.0, y en los que
todos hemos aprendido.Sin embargo y a pesar de todo el trabajo realizado, si
no existe una clara política de marketing (además del viral, por supuesto), todo
este esfuerzo no llega al conocimiento de la comunidad a la que servimos. Y de
eso se quejaba el profesor de matemáticas con el que comenzábamos este post. El
marketing empieza por la propia biblioteca, y en este sentido se envió una
nota
de prensa que ayer vio la luz en ABC, en el ABC digital.Hay otras
bibliotecas universitarias españolas, como la de
Sabadell,
Barcelona, o
Carlos
III, que ofrecen servicios 2.0 y de las que tenemos mucho que aprender, y
probablemente avanzaríamos más deprisa si, recogiendo una idea de la C3,
trabajáramos de forma colaborativa, compartiendo experiencias, errores y éxitos,
y poniendo en común nuestra experiencia y actitud 2.0.Sin duda ganaríamos en
servicios y en visibilidad.